En la viñeta podemos ver como un adulto le dice a un niño que hay que confiar en los demás, no es fácil confiar en los demás. La confianza no es una cosa que se pueda conseguir fácilmente; hay que ganársela, hay que demostrar a los demás que pueden confiar en ti. Es muy fácil decirlo pero no es tan fácil confiar de verdad en alguien. Hay personas que confían más rápido en otros y hay otras que no confían en casi nadie, hay personas que a simple vista te transmiten confianza y hay otras que por mucho que lo intenten no te transmiten esa seguridad que te hace falta para poder confiar en ella.
Al principio, cuando somos niños confiamos en los demás con más facilidad, sin ningún miedo, pero con el paso del tiempo nos vamos dando cuenta de que no se puede confiar en cualquiera tan rápido porque hay gente que se aprovecha de la confianza de los demás para hacer daño. Me da mucha pena que esto ocurra porque se está muy bien cuando confías en alguien sin ningún miedo, pero por culpa de esas personas que se aprovechan, se va creando un miedo en nosotros que hace que la próxima vez no confiemos con tanta facilidad.
